lunes, 23 de abril de 2018





“El Petro, recursos naturales e inclusión social”

Abg. Euclides Quevedo 
Experto en Cibernética Jurídica

El jefe de Estado Nicolás Maduro, en una estrategia de extraordinaria política pública inteligente y audaz, inicia el despegue que necesitaba la Revolución Bolivariana para el salto adelante que siempre abogó Hugo Chávez, al rescatar la propuesta de la creación de la criptomoneda “El Petro”.

Con una combinación de innovación tecnológica, recursos naturales y plena inclusión social, emprende el salto adelante en la conversión de la Patria en una verdadera Potencia; esta ventana de oportunidades en ciencias de la vida y ciencias de materiales, nos coloca en una privilegiada situación ante la revolución tecnológica en puertas por la tecnología disruptiva del blockchain, con enormes recursos naturales, energéticos que permiten financiar la innovación alrededor de ellos, junto al poder que nos da la apropiación y posesión de estos recursos naturales, y para ello debemos estar informados, involucrados profundamente, científicamente, técnicamente, políticamente, ideológicamente de lo que esta pasando.

La revolución informática ya es cosa del pasado, internet amplió enormemente el acceso a la información, facilitando la interacción en redes para la colaboración mundial, y ante nuestros ojos estamos siendo testigos y protagonistas del inicio de una trasformación tecnológica, siendo nuestra Patria participe en esta ola de ruptura, de rompimiento al orden mundial establecido sobre todo en aspectos económicos y financieros y especialmente en materia monetaria.

No sólo la revolución informática e internet han producido un cambio profundo en el mundo, en las complejas sociedades de hoy a través de la interacción de redes a cualquier distancia, ampliando enormemente el acceso a la información y al conocimiento, para la adquisición de mayor conocimiento, sino que además permiten una nueva forma de entender la economía, hoy cuando estamos camino hacia la relocalización social de la economía, de la economía comunitaria, comunal en oposición a la globalización neoliberal.

En los años setenta del siglo veinte vimos como aparecen las placas impresas que dieron origen a las placas madre, en los años ochenta los computadores personales, en los noventa aparece internet, en los dos mil, las redes sociales y los teléfonos inteligentes y esto se va repitiendo cíclicamente; Venezuela no ha estado al margen de estas trasformaciones y hoy tenemos nada más y nada menos que una revolución similar a la producida por internet en el mundo, con la apertura hacia la arquitectura del blockchain o cadenas de bloques, junto al criptoactivo “El Petro”.

El Presidente Chávez visionó cómo se convertiría la Patria venezolana en una verdadera Potencia no solo en la región latinoamericana, sino qué sería vanguardia en el mundo de la innovación tecnológica en buena medida para un país en desarrollo, sus inmensos recursos naturales en petróleo gas coltan thorium oro diamantes agua dulce entre otros, sin dejar de pagar la enorme deuda social con las mayorías necesitadas con una incuestionable plena inclusión social.

Con nuestra alta dotación de recursos naturales, energéticos nos hemos incorporado a un proceso dinámico capaz de convertirnos en los proveedores de materiales para industria y para la alimentación de la población. Sí los países llamados “desarrollados” se han convertido en la fábrica del mundo, Venezuela muy bien se convierte en proveedor de un amplia gama de insumos naturales, sintéticos, renovables, reciclables, desde los estándar hasta una gran variedad de materiales especiales de alta tecnología, minerales, químicos y biológicos.

Con un alto componente satelital, con tres satélites en orbita, con minería, metalúrgica, química, petroquímica y farmacia, agroponía, agricultura y toda la agroindustria, biotecnología, acuicultura, cerámica, energía, refinación, electricidad, el turismo especializado y porque no con nanotecnología, estamos rompiendo amarras tecnológicas; es decir, al tomar en cuenta la ciencias de la vida, en ciencia de materiales y hoy en criptoactivos nos colocamos con ventaja para lo que será la próxima revolución tecnologica y con una combinación de biotecnología, bioeletrónica, nanotecnología y nuevos materiales nos impulsaran a la verdadera suma de felicidad posible para la población venezolana.

Con el nacimiento de la criptomoneda “El Petro” propiedad común de todos los venezolanos, se da un salto cualitativo en materia de innovación tecnológica, una herramienta que ha dado un golpe certero a la economía especulativa, al mercado capitalista que hace suyos valores negativos como el afán de lucro y competencia, que toma el dinero, el capital como objetivo de la economía y no el bien común, como bien comunitario, el bien comunal, en fin el buen vivir.

Se ha vencido el miedo y se ha decidido innovar, asumir riesgos, cambiarle la vida al prójimo, pensar en el futuro tecnológico, liberarnos con la tecnología, una visión para la construcción de un futuro exitoso para nuestra república, para América latina y el Caribe que nos permite prosperar junto a los países llamados avanzados que están a punto de colapso sumidos en la financiarización.

Esta innovación tecnológica y en ella la creación del Petro como criptoactivo venezolano, no cabe ninguna duda que será la criptomoneda del futuro y todas las empresas, industrias y comercios, la administración pública y todas las ramas del poder publico venezolano, así como todos los ciudadanos deben comprender que la cibermoneda el Petro será sin ninguna duda uno de los criptoactivo de mayor fortaleza en el mundo por cuanto están respaldados por activos reales como son los recursos naturales y los cuales Venezuela los contiene en inmensas cantidades y para todos los ámbitos tecnológicos, incluyendo la nanotecnología, y las grandes reservas en thorium que será sin duda ninguna la energía limpia del mañana, sin dejar de advertir la revolución tecnológica que producirá la arquitectura del blockchain o cadena de bloques en el poder público venezolano en todos sus ámbitos.
@euclidesquevedo